El viernes pasado llevamos a cabo una actividad relacionada con los Derechos de los niños y las niñas.
Pintar con chocolate.
Una vez listo el cacao, pintamos con los dedos y las manos sobre unos papeles de mural grandes colocados en las mesas. Las actividades sobre murales amplios, nos permiten trabajar con grandes grupos musculares, pintar moviendo todo el brazo sobre un soporte amplio, es diferente a cuando lo hacemos en un folio y con un instrumento gráfico. Permitiendo un desarrollo próximo distal, desde el centro de nuestro cuerpo hacia la punta de los dedos.
Pintar con chocolate es una actividad sensorial en toda regla: el olor del cacao, su sabor, su textura, su temperatura (ya que preparamos chocolate templado…) Y su color, puesto que estamos en otoño y el marrón es el color de las hojas que recogemos cuando se caen del árbol. Trabajamos el desarrollo sensorial de manera muy vivencial. Sin olvidar que también se trabaja la “propiocepción” que es la toma conciencia de sí mismos y de su propio cuerpo, así como de sus posibilidades de acción.
Una vez finalizada la actividad, todavía quedará una parte importante… Limpiar.
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